FASE 2: ATMÓSFERAS, PETER ZUMTHOR

Nacido en 1943 en Basilea, se formó como ebanista y como arquitecto en la Kunstgewerbeschule de Basilea y en el Pratt Institute, Nueva York. Desde 1979 tiene su propio despacho de arquitectura en Haldenstein, Suiza. Es profesor en la Academia di Architettura, Università della Svizzera Italiana, Mendrisio. Además, ganó el premio Pritzker en 2009.

Vamos a comentar la conferencia que dio en 2003 titulada «Atmósferas». Entornos arquitectónicos. «Las cosas a mi alrededor». En dicha conferencia, Zumthor nos comparte la visión que él tiene de la arquitectura, de primeras impresiones, lo que le transmite un edificio (lo que lo envuelve, lo que hay dentro y lo que representa). A esto Peter lo denomina «Atmósferas», como una sensibilidad emocional que percibimos de manera inmediata al observar un sitio y que no entiende a la lógica… Se basa en varias experiencias, reflexiones y ejemplos para presentarnos lo que es el espacio mediante 9 mini capítulos y 3 anexos.

1. El cuerpo de la arquitectura

Un espacio es capaz de producir innumerables efectos en una misma persona. Según el arquitecto, el primer y más grande secreto de la arquitectura es «reunir cosas y materiales del mundo para que, unidos, creen este espacio».

Para explicar un poco mejor este concepto, hace una comparación al cuerpo humano y su anatomía (con su piel, sus órganos que no se ven). Para él, la arquitectura es eso, todo lo que rodea.

2. La consonancia de los materiales

A través de un ejemplo, nos expone cómo experimentando con los diversos tipos de materiales, espesor, peso y brillo podemos encontrar la mejor forma de combinarlos para poder conseguir la mejor consonancia y harmonía entre ellos, ya que hay infinitas posibilidades.

3. El sonido del espacio

En este caso, el arquitecto manifiesta que todo espacio tiene sonido y este puede ampliarse o transformarse, modificando a su vez la percepción del observador.

4. La temperatura del espacio

Aquí Peter manifiesta el término «temperar», poniendo de ejemplo la temperación de pianos para explicar que en la arquitectura pasa lo mismo; hay que buscar la temperatura adecuada a través de la luz, la sombra… Por ello hay que saber jugar con los materiales, ya que son los responsables de generarnos frío o calor; por ejemplo, el hierro es frío y la madera cálida. Según Zumthor, «la temperatura es tanto física como también probablemente psíquica».

5. Las cosas a mi alrededor

En este apartado, se centra más en observar las pequeñas cosas de dentro, cada minúsculo detalle, ya sean personas, objetos… Para la arquitectura es importante que cada cosa combine entre sí para hacer del lugar lo más armonioso posible y así se puedan percibir estímulos únicos.

6. Entre el sosiego y la seducción

Zumthor asegura que la arquitectura no se puede experimentar de manera casi inmediata. Los espacios se construyen con el propósito de que las personas transiten por allí libremente, descubriendo poco a poco el lugar. En arquitectura se debe seducir a los visitantes en lugar de querer conducirlos por un pasillo.

7. La tensión entre interior y exterior

Para el arquitecto, uno de los aspectos más fascinantes de la arquitectura es la existencia de un límite entre interior y exterior. En esta transición existen umbrales, huecos y vistas, que son importantes a la hora de crear una percepción del edificio. En ocasiones, dichas sensaciones son capaces de hacer que un edificio hable por sí solo.

8. Grados de intimidad

Zumthor nos habla sobre la escala en los edificios. Alega que no solo se trata de dimensiones físicas, sino de cómo de grandes o pequeños nos hace sentir un edificio, acogidos o intimidados. Los monumentos que son públicos suelen ser grandes y amplios, ya que acogen a mucha gente todos los días, mientras que lo íntimo es todo lo contrario.

9. La luz sobre las cosas

El último elemento que el arquitecto menciona es la luz. Según él la luz es esencial para la creación de una atmósfera única, ya que interactúa con los materiales y la superficie del edificio. Piensa en el conjunto del edificio como una masa de sobras a la que le va añadiendo luz para ver cómo esta interactúa con el espacio.

Además de estos nueve puntos, Zumthor añade tres reflexiones personales que considera esenciales en su enfoque arquitectónico:

Arquitectura como entorno

Zumthor explica que le gusta hacer edificios que formen parte de su entorno y que formen parte de la vida de las personas. Le gusta imaginar que sus obras son recordadas por la gente incluso si no saben quien es el arquitecto. Para él, la arquitectura es exitosa cuando forma parte de la vida de las personas.

Coherencia

El arquitecto recalca que la arquitectura ha de ser coherente y que todas las decisiones que se toman durante la realización del diseño se hacen en base al uso que va a tener el edificio. No busca hacer formas «supercool», sino diseñar edificios funcionales.

La forma bella

Por último, Zumthor reincide en que la arquitectura es arte y belleza. Su enfoque no se centra especialmente en la forma, pero al final de todo el proceso busca que los edificios sean bellos, pero si no es el caso, asegura que vuelve a empezar con el proyecto, ya que para él la belleza es una cualidad esencial en la arquitectura.


Reflexiones

A partir de los ejemplos que nos proporciona Zumthor nos llega, a los que hemos empezado esta carrera, de una forma más clara toda la información. A su vez reflexiona sobre ciertos temas que hace que te quedes sorprendido de su sabiduría y conocimiento y además posee una habilidad innata para poder captar la atención de los receptores insospechada.